Iniciada en 1965 por Antonio Dimare y sus cinco hijos, la empresa de Juguetes Rasti se ha convertido en emprendimiento ejemplar. Además de exportar sus productos a varios países de distintos continentes como Estados Unidos, Reino Unido, Marruecos, Sudáfrica, Brasil, entre otros, es considerado como un “caso de éxito” para diferentes presentaciones, con el objetivo de inspirar y motivar a todos aquellos que desean construir su proyecto propio.
Luego de su entrevista, donde indagó sobre cómo despertar el espíritu emprendedor, de qué manera puede potenciarse una marca para que tenga trascendencia internacional y destacó que, en tiempos de crisis, “la salida más efectiva es escuchar”, Daniel Dimare, actual director de Marketing y Comunicación Institucional de la compañía, relata y detalla, en exclusiva con Multitaskers, diez consejos para que todo emprendedor puedan concretar su meta. A continuación, las claves que permitieron a Juguetes Rasti convertirse en un negocio exitoso:
- Tener en cuenta y capitalizar las experiencias anteriores de la empresa o de las generaciones que nos antecedieron.
- Capacitarse en temáticas que sumen valor a tu empresa.
- Tratar de observar constantemente al sector donde nos movemos y detectar productos o servicios complementarios que otras empresas no dan. Ofrecerlos nos diferenciará y posicionará mejor.
- "Marketing de la cordialidad": para atraer clientes y consumidores, no solo es necesario buen producto y precio. Ellos son personas y aprecian el buen trato, el respeto, la cordialidad y ser tratados como "invitados" si van a tu empresa.
- Astucia versus presupuesto: a veces con creatividad y esfuerzo las pymes le podemos competir a grandes empresas del sector que cuentan con apoyo financiero de sus casas matrices.
- Participación-Colaboración con otras marcas: generar sinergias a través de alianzas o colaboraciones mutuas, con marcas o empresas de otros rubros pero afines a nuestro target de compradores o usuarios.
- Permitir que ganen todos: que tu negocio te permita ganar dinero pero también se lo permita a tus clientes, a tus vendedores, proveedores y personas que trabajan contigo.
- Evitar confundir los flujos económicos de la familia con los económicos de la empresa.
- Respeto y confianza mutua que fortalece la familia y la empresa
- Armar una estructura organizacional coherente con la complejidad y los objetivos de la empresa y la familia para no generar desbordes de trabajo o frustraciones.
Como cierre final, Dimare da un último mensaje para los lectores emprendedores: “Si el clima que se respira en la empresa pasa por el esfuerzo compartido, la pasión por lo que se hace y el reconocimiento de los logros, cada día no se irá a la empresa simplemente a trabajar sino a disfrutar de los desafíos”.