Lo que comenzó siendo una charla casual en un bar, pasó a ser uno de los movimientos internacionales que mejor integran los emprendimientos y la ecología. Todo comenzó en Londres, Inglaterra, a finales de los ochenta, cuando un grupo de amigos y colegas se encontraban hablando sobre ecología. Simultáneamente, en la mesa de al lado, notaron que había un grupo que también desarrollaban temas similares. La unión de las dos mesas, como un acto integrativo, fue el chispazo que se esparciría alrededor del mundo en más de 500 ciudades del mundo. La ciudad de Rosario, Mendoza, La Plata y Buenos Aires, son una de ellas.

Multitaskers entrevistó a Ethel Bonnet-Laverge y Vanina Estrugo, quienes tomaron la antorcha de los Green Drinks en Buenos Aires. La repercusión que tuvieron estas reuniones llevó emprendedores y docentes como Nicolás Cludius de Onda Orgánica y Ana Rapela, de Dos Puntos e invitada oradora para compartir sus conocimientos y contar su experiencia. Las reuniones podrían ser consideradas como “una red internacional de encuentros con la excusa de compartir un trago, acerca a profesionales y emprendedores interesados en temas de sustentabilidad; medio ambiente y problemáticas sociales. La idea del evento es propiciar un espacio que permita relacionarse con otros referentes de escena verde para poder establecer contactos; hacer nuevos negocios y conocer los emprendimientos que se llevan a cabo”, describe Cludius.

¡Salud!

Vanina Estrugo es Licenciada en Relaciones Públicas y organizadora de eventos. Junto con Ethel Bonnet-Laverge, Licenciada en Comercio Internacional en Francia, trabajan en conjunto con  en pos de forjar el contexto para darle continuidad a estas reuniones. “Empezamos a las 19hs en un bar de la ciudad, en general por Palermo”, describe la consultora en sustentabilidad. En ellos se busca “propiciar espacios de diálogo relajado, entre agentes de distintos sectores de la sociedad, emprendedores, profesionales, ONG, entes de gobierno, empresas y prensa vinculados a la escena sustentable de la ciudad, que de otra manera sería más complejo encontrar todos juntos”, son los principales objetivos que menciona Vanina.

Estas reuniones fomentan la convergencia de diferentes agentes, lo que da lugar a alianzas, convenios, ideas, nuevos proyectos y vínculos que se sostienen en el tiempo. “La gente se anota y toma algo, charla con pares mientras los demás terminan de acreditarse. Luego de 15-20min empezamos la parte de charlas con la presentación de tres proyectos sobre el tema elegido ese mes. Y luego volvemos con el espacio de networking, describe Ethel.

RSE en Argentina

“Adoptar medidas de sustentabilidad tiene varios beneficios muy concretos”, menciona Ethel Bonnet con respecto a la implementación de políticas RSE sustentables en las empresas de cualquier tamaño. Las principales ventajas que describe son “diferenciación, ahorro por optimización de procesos productivos, y mejora de la reputación por generar impacto positivo con la comunidad (empleados, proveedores, clientes, sociedad). Como cualquier proyecto, la parte de investigación puede llevar tiempo a implementar”. A su vez, un emprendedor que asista a las reuniones no sólo se estaría llevando un nuevo paradigma desde el cual operar, sino también, ayuda concreta de sus organizadores en lo que esté a su alcance, “Hoy buscamos ayudar a los emprendedores en este sentido, aportando contactos, ideas y herramientas concretadas desarrolladas por organizaciones públicas, académicas y privadas”.

“Es un cambio de visión hacia el que las empresas están caminando, algunas más lento y otras más rápido”, explica Vanina Estrugo de acuerdo a su visión del traspaso de las empresas a la adopción de políticas de sustentabilidad. “Es la toma de conciencia de que toda acción genera un impacto y es necesario hacerse cargo de eso. Las acciones no tienen por qué ser costosas, ya que se trata en muchos casos de revisar procesos, informar al personal sobre determinados temas, como acciones iniciales”. ¿De qué manera se puede dar comienzo al círculo virtuoso? “Se puede comenzar con pequeñas acciones, como la separación de residuos, concientización en el uso responsable de los recursos, entre otros”. La razón que se halla detrás de no adoptar políticas sustentables en Argentina, comenta la Lic. en Relaciones Públicas, se debe a que, en muchos casos la resistencia, “Tiene que ver con una cuestión cultural, en otros por desconocimiento, por ignorar o no darle importancia al impacto que generan, al impacto positivo que pueden provocar a nivel social, ambiental y económico, además de imagen positiva hacia su público interno y externo”.

Fertilidad empresarial

“Las reuniones de Green Drinks nos han ayudado mucho a darnos a conocer, promocionar lo que hacemos y nacieron posibilidades de juntarnos con otros emprendedores sustentables para potenciar nuestras iniciativas”, aclara Ana Rapela, de Dos Puntos, un emprendimiento “100% sustentable”. Dos Puntos se trata de un estudio de Diseño Industrial Sostenible que trabaja desarrollando productos y servicios de manera social, ambiental y económicamente responsable, en línea con las tendencias propuestas en los Green Drinks. “Todo comenzó dentro de un laboratorio de la UBA/FADU, donde se experimenta con materiales de descarte. Allí se logró estandarizar el proceso del prensado de diferentes plásticos, generando una placa con la cual creamos nuestros productos. Esta tecnología se transfirió luego a cooperativas”, asevera la docente Licenciada en Humanidades y Ciencias Sociales. A partir de allí, hasta hoy trabajan con distintos descartes que llegan de diferentes sectores. “Nuestra producción se realiza en cooperativas – que son entrenadas por el emprendimiento- y talleres de oficios, fomentando así la generación de empleo social”. Se llevan a cabo una línea de objetos propios y también el desarrollo de productos a medida para empresas, tomando como base el descarte que ellos mismos generan como estrategia de RSE.

Nicolás Cludius es Técnico Superior en Comercio Exterior y Negocios Sustentables desempeña también como Consultor Comercial para emprendedores de impacto. “Desde hace años que asisto al evento, es un lugar donde conocí desde proveedores, hasta clientes y profesionales de distintas áreas con las que me fui relacionando y creando una relación permanente. Como resultado, a fines del 2011 fundó Onda Orgánica, una empresa que busca concientizar acerca de la problemática ambiental y social existente, ofreciendo prendas realizadas con algodón orgánico y confeccionadas en talleres libres de trabajo esclavo e infantil, bajo las normas del comercio justo. “Onda Orgánica surge de mi interés personal de crear conciencia acerca de la problemática ambiental y social existente. La empresa tiene una certificación B, “es un sello que acompaña una tendencia mundial de empresas que están cambiando la forma de hacer negocios. Empresas que, sin dejar de ganar plata, apuntan a resolver problemas ambientales y/o sociales, buscando no ser las mejores del mundo sino para el mundo”.

Anibal Parera